miércoles, 31 de mayo de 2017

DINÁMICAS: EMOCIÓMETRO Y GESTIÓN DEL TIEMPO

Siguiendo con la línea de nuestro taller emocional, la pasada semana, nuestros alumnos realizaron una manualidad a la que le se puso el nombre de "Emociómetro". Como su nombre bien indica, el "Emociómetro" es un termómetro que mide nuestro estado de ánimo: Contento/a, triste, cansado/a, enfadado/a... 

Los materiales que han utilizado para esta actividad son muy simple: unas fichas con los diferentes estados de ánimo, unas cintas para que los alumnos puedan colgarlo en sus casas, y unas pinzas, en las que los alumnos han puesto los nombres de los miembros de sus familias. También han utilizado difenretes tipos de colores para adornar sus manualidades.

Hemos creado dos tipos de "Emociómetros": unos grande para el centro, con el nombre de los alumnos y profesores; y otro más pequeño que los alumnos se han llevado a sus casas para compartirlo con sus familiares.

De esta manera tan sencilla podemos indicar a los demás el estado emocional en el que nos encontramos, y así, de este modo, el resto de personas que estamos alrededor podemos variar nuestra manera de interactuar esta persona en función de su estado.

Una actividad muy sencilla de realizar, muy práctica y cuyo valor informativo es muy importante para el resto de las personas que nos rodean.

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La segunda dinámica que vamos a comentar, es la realizada el pasado viernes. Dicha dinámica recibió el título de "Gestión del tiempo". 

Desde el Centro se viene trabajando en una una dirección que favorezca la capacidad organizativa de los alumnos, y un de los factores que más determinan la organización es el tiempo.

¿Y cómo hemos querido trabajar la gestión del tiempo?
Aprovechando las fabulosas instalaciones, de las cuales podemos hacer uso gracias a las HH. TT. Capuchinas de Segorbe, y también el buen tiempo que ya empieza a hacer. Se prepararon una serie de actividades lúdicas en el patio del Centro. Dichas actividades había que realizarlas en un tiempo determinado y organizados en parejas. Las actividades consistían en:

- Lee y sigue las instrucciones: resolver una acertijo siguiendo las indicaciones de una tarjeta. En la que trabajamos la capacidad comprensiva.


- Torea al 3: Nombrar todos los números del 1 al 30, sin nombrar los múltiplos de 3,y diciendo en su lugar "Olé". Un divertido ejercicio de coordinación.

- Abecedario: escribir palabras relacionadas con el centro que empiecen o contengan las letras del abecedario. En la que se pone a prueba la riqueza léxica de los alumnos/as.

- Usos inesperados: los alumnos y alumnas debían pensar diferentes y posibles usos de un objeto: un cucharón. ¡Imaginación al poder!

- Papiroflexia: siguiendo las instrucciones los niños y niñas debían reconstruir una figura a partir de una hoja de papel. pudimos comprobar que la capacidad de seguir instrucciones y la velocidad de compresión de los niños y niñas es muy elevada.


- Trasvase de agua: una prueba de velocidad en la que los niños y niñas tenían que transportar la mayor cantidad de agua posible de un vaso a otro. Ejercicio de coordinación y rapidez.


¿Qué decir?


Pues que desde el centro opinamos que una de las mayores fuentes de aprendizaje es el juego, y cuando el tiempo lo permite y podemos realizar actividades lúdicas los resultados y conclusiones que esgrimen los alumnos y alumnas son asombrosos.


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